miércoles, 4 de diciembre de 2013

Tolerancia cero!

Estaba la otra vez conversando con una de mis mejores amigas (btw es una brand new mom) y preguntándole como le iba con todo el rollo de la maternidad, los suegros, su familia, la de el... y centrándonos un poco en la de el, me contó que su cuñada le cae bien peroooo... Siempre hay un pero. 

Me contaba que su cuñada era de las mamás que no quisieron recibir epidural ni nada para el dolor cuando tuvo a sus hijos, que al momento de dar de lactar le ardían y dolian los pezones y ella lo seguía haciendo (y me parece genial, de hecho yo también lo hice).
Y tenemos por el otro lado a mi amiga, que tuvo cesárea no porque ella quería sino porque el bebe ya corría peligro y el doctor lo recomendó así. Y con el tema de la lactancia pues el primer y segundo día de nacido aún no le bajaba leche y la cuñada se vio en obligación de dar su punto de vista, encima de preguntarle a la enfermera porqué su sobrino no tomaba leche materna.

Punto de vista no pedido. Si hay algo que me molesta para resumir esta historia son este tipo de mamás. Y por favor no me tomen a mal no quiero chocar con nadie, no hablo de las que hacen todo naturalmente (cada uno hace lo que creen que es mejor para sus hijos ¿no?) y tienen un umbral del dolor envidiable, no para nada. Por ahí no va la cosa. No soporto a las mamás que por haber dado a luz sin epidural o por haber soportado la lactancia sin decir ouch o quejarse crean que son mejor mamás que otras. Todas somos mamás y de verdad es de muy mal gusto hacer ese tipo de comentarios, minimizándote a ti como mamá ¿no creen?

Nunca juzguen porque no están en los otros zapatos y no saben porque esa mamá tomo una decisión, si tu umbral del dolor es alto, pues felicitaciones, pero darling eso no te hace mejor mamá que nadie. Cada loco con su tema, así que dejemos nuestra actuación de jueza de lado y basta ya de creernos Mel Gibson en corazón valiente o las madres teresas de calcutas porque una vez más mis queridas todas somos imperfectas. Recuérdenlo siempre antes de juzgar la posición de otra, las decisiones o creencias de otras mujeres que no coinciden con los tuyas. Tolerancia se llama eso. 


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