7 tips para la hora de comer

Algunas mamás me vienen preguntando qué hice para que Joaquín coma solo.

Pues la verdad, solo deje que todo fluya. Ahora como siempre les digo, lo que me puede resultar a mí, capaz no te resulte a ti. Cada niño es único. El tema de las comidas es un poco complicado. Al principio me estresaba el que no coma (cuando recién empezó a hacerlo) veía otros niños comer entrada segundo y postre... yo miraba a mi hijo con las justas recibir unas 3 cucharadas... Les cuento mi experiencia, espero que les sirva:

1) No te estreses... deja que fluya: Lo primero que me di cuenta viendo mi caso y el de otras mamás, es el estrés. Les puedo jurar que no sacarán ningún beneficio de eso, todo se transmite ¿Qué niño quiere comer en un ambiente de estrés? Yo deje de hacerlo, y les hago mi pinky promise que me fue bien. La hora de comer fue divertida, el ya no se sentía estresado y yo tampoco.

2) Deja que se ensucie: Si vas a estar pendiente más de la ropa que de lo que experimente tu bebé, estamos por el camino equivocado. Un niño es un niño, no se le puede exigir a un bebé no ensuciarse cuando recién aprende a comer y a experimentar sabores y texturas nuevas. Yo deje que lo haga (si claro, la embarradera era doble trabajo) pero en mi humilde opinión creo que tuvo buenos resultados. Ahh, claro una cosa es que de vez en cuando puedan sentir, embarrarse, y probar la comida (sobre todo cuando recién empiezan) pero hay que poner cierto límite entre experimentar y jugar siempre con la comida. Ojito con eso, que no se convierta en algo cotidiano.

3) No le exijas: Si tu bebé come y no termino la última cucharada no le exijas. Ellos saben hasta cuando comer, de repente se llenó y estas exigiendo más de la cuenta. Si lo sigues haciendo harás que la hora de comer se convierta en la hora de la tortura. Recuerda que sus estómagos son más pequeños. En mi caso, cuando Joaqui se llena, yo me doy cuenta porque quiere empezar a jugar con la comida, es en ese momento que le quito el plato. Le doy algo de tomar y ofrezco una fruta (a ver si me liga y la come). Si la acepta y deja la mitad, es libre de irse a jugar. Quiere decir que se llenó.

4) Predica con el ejemplo: Trata en lo posible que el bebé siempre los vea comer. Ellos son como unos monitos, quieren imitar todo. Si los ve comiendo con tenedor, tomando en un vaso, comiendo con individual, limpiándose la boca con una servilleta, el querrá imitar todo eso. Sé que a veces los horarios no coinciden, pero en mi caso tratamos de ajustarnos un poco al suyo y buscamos que siempre nos vea comer. Tanto nos imita que ahora se le dio por no querer usar babero como nosotros. ¿Cómo hacemos? ¡Ahora pues!

5) Hora de comer divertida: Haz una rutina, una canción por ejemplo, que él o ella asocie la canción con la hora de comer.

6) ¡No lo hagas!: Por nada del mundo se te ocurra perseguir a tu hijo por todo el comedor con el plato y la cuchara. Si crees que es la única manera que come, busca otra solución. Cuando quieras sacarlo a comer, no podrás estar persiguiéndolo de la misma manera en el restaurante. 

7) No lo abrumas: Les doy una imagen. Ustedes en la mesa, a punto de comer y al lado alguien mirando como lo haces sin quitarte un segundo la mirada de encima. ¿Les daría ganas de seguir comiendo? No lo creo, yo con Joaquín me di cuenta que a cuanto más lo miraba a ver si estaba comiendo, masticando, tomando agua y chequeándolo a cada rato me daba cuenta que menos eran sus ganas de comer. Denles un poco de independencia en ese sentido. Si el niño come en el comedor, vayan a servirse algo en la cocina, estén atentas, pero no tan pegadas. Denle su espacio. Obvio no descuiden a sus niños, pero tampoco estén encima de ellos. Busquen el equilibrio.

¡Espero que les sirva mis lindas imperfectas!...Ya me dio hambre...¡Ahora pues!