Mi primera vez en el nido

Me levanté más temprano de la cuenta, él estaba a mi lado durmiendo plácidamente, y yo emocionada esperando que abra sus ojitos para empezar a alistarlo. Se despertó como siempre y como nunca de mal humor (esto no se ve bien).

Tenía las cámaras listas, lo peiné como peinado típico de primer día de nido, le puse su mochilita roja de Angry Birds que su papá y yo le compramos el día anterior y el no quería despegarse de mi ni para la foto en la entrada de la casa.

Apenas subió al carro, se emocionó (pata de perro como su mamá era obvio que pasaría eso). Llegamos al nido, lo bajé para que camine solo y me dio su manito. No sé quién estaba más nervioso él o yo, entramos al salón y los niñitos vinieron todos a saludarlo… (mala idea) se me trepó como monito y no quiso bajar. Sólo pedía que lo saquen para el jardín donde estaban los juegos (espero que no le guste más el recreo que las clases como a su mamá, ¡no Dios no permitas que sea como yo por favor!)

Jugando en los juegos del jardín lo vi feliz, quiso caminar a explorar por todo el nido y ahí fue cuando aproveche para irme a trabajar (lo deje con Diana, la señora que me ayuda a cuidarlo). Me fui preocupada, es primera vez que dejo a mi bebé al nido y tengo mucho miedo de todo también. Como mamá gallina y primeriza, sé que se enfermará más seguido (incluso al entrar lo primero que vi fue un niño con los mocos chorreando), sé que se caerá (solo espero que no sea muy fuerte ni nada grave por favor) y sé que peleará y probablemente le pegarán (solo espero que no lo hagan muy fuerte y sepa defenderse).

No pude evitar sentir una mezcla de sentimientos camino a mi trabajo, recordaba su manito agarrando la mía, me preguntaba si ya se integró, si se habrá quedado llorando, si demorará en adaptarse…lo cierto es que no puedo hacer mucho al respecto solo dejar que todo siga tomando su rumbo. Hoy mi hijito comenzó el nido, una nueva etapa para él y para mí.

Pd: Juro solemnemente no ser de las mamás chinchosas que están por cualquier cosa

metidas en el nido, solo les falta que vengan con lonchera y mochila prácticamente… Dejaré a las profesoras hacer su trabajo sin meter mis narices en todo, pero estaré vigilando…